La mejor forma de conservar embutidos ibéricos en casa

Es muy importante comprender la correcta conservación de los embutidos ibéricos en casa. Disfrutar de nuestros embutidos preferidos suele ser una tarea sencilla que todos conocemos y disfrutamos, pero ¿cuántas veces has encontrado un paquete de chorizo abierto en la nevera que se ha secado y echado a perder? O, ¿te has preguntado alguna vez si deberías almacenar el lomo en el frigorífico o fuera de él?

Para mantener los embutidos en las mejores condiciones y disfrutar de su sabor completo, queremos compartir algunos consejos de José Jara® sobre cómo conservarlos adecuadamente en casa. Si deseas prolongar la frescura de tu embutido favorito, te invitamos a continuar leyendo y descubrir estos consejos para mantenerlos en perfecto estado.

CÓMO CONSERVAR LOS EMBUTIDOS CURADOS EN LA NEVERA

Desde jamones hasta embutidos, estos productos requieren cuidado especial para preservar sus sabores intensos y características excepcionales. Una práctica esencial para garantizar la frescura y seguridad alimentaria de estos productos es su almacenamiento adecuado en la nevera, manteniéndolos a temperaturas entre 2 y 4 grados.

Consejos prácticos para el almacenamiento de embutidos curados:

• Temperatura óptima: Ajusta la temperatura de tu nevera entre 2 y 4 grados Celsius para asegurar un almacenamiento adecuado.
• Envases herméticos: Utiliza envases herméticos para prevenir la contaminación cruzada y preservar la frescura.
• Separación de productos: Almacena diferentes tipos de productos ibéricos por separado para evitar la transferencia de olores y sabores.

CÓMO CONSERVAR LOS EMBUTIDOS LONCHEADOS EN LA NEVERA

Cuando adquieras embutidos loncheados sin envasar al vacío, es fundamental guardarlos en la nevera. La recomendación óptima es utilizar un recipiente hermético, como un tupperware. La temperatura ideal para conservar embutidos loncheados en la nevera es de entre 2 y 4ºC.

Antes de consumir el embutido, te aconsejamos que lo saques de la nevera al menos media hora antes, para que alcance la temperatura ambiente, revele todo su aroma y sabor. Además, de esta forma, se consigue que las lonchas se separen con facilidad y sin que se rompan.

EMBUTIDOS IBÉRICOS ENVASADOS AL VACÍO

La técnica de conservación al vacío consiste en extraer todo el aire del envase, prolongando así la vida útil de los alimentos que contiene. La ausencia de oxígeno retrasa el crecimiento bacteriano en carnes crudas, lo que permite que se conserven por más tiempo. Mientras el envase se mantenga al vacío y los embutidos no entren en contacto con el aire, se mantendrán en buen estado durante un período prolongado.

Sin embargo, es importante seguir ciertas pautas para asegurar una conservación óptima. En primer lugar, es esencial mantener la cadena de frío. Almacenar los embutidos en el frigorífico es la mejor opción, ya que esto retrasa aún más el crecimiento de microorganismos que pueden causar moho en los embutidos y, por lo tanto, su deterioro. No obstante, al momento de consumirlos, se recomienda sacarlos del frigorífico y del envase al vacío un tiempo antes de servirlos. Esto permite que el embutido se oxigene y alcance la temperatura ambiente, recuperando su color y sabor originales. Sabrás que está listo para ser consumido cuando, al abrir el paquete después de unos minutos, las lonchas se separen fácilmente unas de otras.

Cuando el envase al vacío ha sido abierto, es posible conservar el embutido restante, pero con precaución. La mejor forma es asegurarse de que esté bien tapado y envuelto con film transparente, consumiéndose tan pronto como sea posible.

En la tienda online de José Jara® encontrarás diferentes opciones de presentación de los embutidos para que puedas elegir la que mejor se adapte a tus necesidades. Desde piezas enteras, medias piezas o blísters de 60gr o 120gr listos para servir y deleitar gracias a su especial, cómodo y elegante formato.